El viaje se inició a las 8:30 de la mañana con la salida desde el Colegio, en esta ocasión todo el mundo fue puntual y partimos sin incidencias. En la mañana del jueves vistiamos las cuevas del Soplao. El tiempo soleado, el buen ánimo de todos y la belleza de las cuevas hicieron que la mañana transcurriese en un suspiro. Tras esta visita nos dirigimos directamente al albergue de Cóbreces que estaba en "plena actividad" para recibirnos. Tras dejar el equipaje hubo tiempo para comer y pasear por el pueblo y la playa de Luaña. Por la tarde se organizaron juegos y actividades de convivencia que tuvieron una acogida diversa, sin duda la estrella fue el "sing star" (tipo karaoke) donde los alumnos mostraron tanto sus habilidades como sus debilidades canoras. La cena fue a base de macarrones (que debían estar buenísimos ya que desaparecieron por completo) y lomo con ensalada. Tras una noche con no demasiadas horas dedicadas al sueño nos levantamos y tras empaquetar nuestras pertnencias visitamos la localidad de Santillana del Mar. También hubo tiempo para visitar el Museo de la Inquisición y la Tortura y, para las almas más sensibles que fueron las menos, la Colegiata de Santillana y su Claustro. Ya sólo nos quedó tiempo para el viaje de vuelta y una parada técnica para comer en Unquera donde nos aporvisionamos con las corbatas de rigor. Hasta aquí la convivencia, que no estuvo mal.